lunes, 5 de agosto de 2019

LOS CINCO MINUTOS DE JESÚS, 5 DE AGOSTO



LOS CINCO MINUTOS DE JESÚS
5 agosto



Decirle al cristiano que debe hablar de Cristo no es otra cosa que decirle que tiene que amar a Jesucristo; y decirle eso, ¿no parece innecesario? Un cristiano sin amor a Jesucristo es un soldado sin armas, un cuerpo sin vida, ojos sin luz, pulmones sin oxigeno.


Pero si el cristiano tiene a Cristo y lo ama de veras con amor profundo, entonces el cristiano debe hablar de Jesucristo. Sin miedos de ninguna especie. Digamos ante todo que, tanto en esto como en lo demás, el creyente debe ser y manifestarse como un hombre cien por ciento normal; debe aborrecer las extravagancias, rarezas y exageraciones, pero guardando  esa áurea regla de la corrección y de la prudencia, deberá desperdiciar ninguna oportunidad de hablar del Señor y de sus cosas; no ha de tener ningún miedo de dar la impresión de que para él ningún tema hay de mayor interés que Cristo y sus cosas; otros tendrán otros ideales; el ideal del cristiano es Jesucristo.


P. Alfonso Milagro

domingo, 4 de agosto de 2019

LOS CINCO MINUTOS DE JESÚS, 4 DE AGOSTO


LOS CINCO MINUTOS DE JESÚS
4 agosto




El ideal polariza todos los esfuerzos del hombre que lo tiene. 

¿Es Cristo el que realmente absorbe tus energías, y da sentido a todos tus entusiasmos?

Cristo no es un recuerdo histórico, sino una presencia. Una presencia viva y vivificante. 

Déjate vivificar por Cristo.


P. Alfonso Milagro




sábado, 3 de agosto de 2019

LOS CINCO MINUTOS DE JESÚS, 3 DE AGOSTO


LOS CINCO MINUTOS DE JESÚS
3 agosto



Bajos las especies de pan y vino que vemos en nuestros altares debemos saber descubrir a Cristo.

Pero también -aunque en menos intensidad- debemos saber descubrirlo "bajo las especies y formas" de nuestro prójimo. Es que el prójimo es el sacramento de Cristo.


P. Alfonso Milagro

viernes, 2 de agosto de 2019

ES PRIMER VIERNES DEL MES, REZA ESTA ORACIÓN AL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS


Es primer viernes del mes,
reza esta oración al Sagrado Corazón





Hoy es el primer viernes del mes, día en que, según una antigua y popular devoción, comulgamos y se lo ofrecemos al Sagrado Corazón de Jesús para que se nos conceda su misericordia y protección.

Cristo le dijo a Santa Margarita María de Alacoque, religiosa francesa, que todos aquellos que comulguen nueve primeros viernes de mes seguidos, no morirán en desgracia, sin recibir los sacramentos y su Corazón será su refugio.  

¿No sabes qué rezarle hoy día al momento de comulgar? 
Quizás esta oración pueda ayudarte:


Corazón Sacratísimo de Jesús, que por el grande amor que nos tienes, te has dignado prometernos la perseverancia final y la gracia de no morir sin Sacramentos, haciéndote nuestro seguro asilo en la última hora de nuestra vida; humildemente te pido que cumplas en mí tu palabra, que tanta confianza inspira a nuestros corazones. Yo, por mi parte, prometo hacer cuanto pueda para amarte más y más y para hacerme digno de una tan grande Promesa, evitando el pecado y todo cuanto pueda desagradarte. Te pido para ello, tu gracia, que espero alcanzar por lo méritos de tu mismo Corazón. Amén.

LOS CINCO MINUTOS DE JESÚS, 2 DE AGOSTO


LOS CINCO MINUTOS DE JESÚS
2 agosto




El Evangelio en la mente de Cristo es algo operante, activo, dinámico.

En tus meditaciones del Evangelio, ¿no has llegado todavía a descubrir su dinámica?

Sería lo mismo que no descubrir en el hombre su espíritu y ver solamente la materia.




P. Alfonso Milagro

jueves, 1 de agosto de 2019

LOS CINCO MINUTOS DE JESÚS, 1 AGOSTO


LOS CINCO MINUTOS DE JESÚS
1 agosto



Hablar es fácil; pero callar es todo un arte y requiere prudencia y dominio propio.

Cristo estuvo callado, vivió en silencio e ignorado durante treinta años, para luego poder hablar por espacio de tres años solamente.

La palabra de Cristo, al promulgar su obra redentora, fue amable, atrayente, pero decisiva, penetrante y convincente. Llamó al pan pan y al vino, vino, sin rodeos y con sencillez.

Pero cuando calló, no se defendió frente a las infamias, calumnias, acusaciones, injusticias, atropellos y crímenes.

Ciertamente, no basta hablar; también es preciso saber hablar.

Hay que aprender el arte de hablar.

Y no parece que este arte sea muy fácil de aprender; hay pocos peritos en él.


P. Alfonso Milagro